miércoles, 31 de octubre de 2007

Praga una ciudad impresionante

PRAGA, República Checa.- No importa que un inclemente frío de cuatro grados complementado por una pertinaz llovizna ataque sin piedad al visitante, y que haya que recorrer bajo estas condiciones durante más de tres horas, a pies, el centro de Praga, que se caracteriza por sus sinuosas calles y edificios de todos los estilos arquitectónicos. Pese a esto...¡bien vale la pena conocer esta imponente ciudad del centro de Europa, que por la a gran cantidad de torres y miradores da a la urbe el apodo “La ciudad de las cien torres”, hace ya muchos años!. El terreno quebrado da a Praga su encanto inolvidable y un panorama impresionante. Las colinas praguenses ofrecen muchas vistas espléndidas. La ciudad de Praga es muy bonita, es ideal para perderse callejeando porque casi todos los edificios que tiene son dignos de ver. Cada uno de ellos tiene algún tipo de escultura, adorno, motivo que lo hace singular. Sus casas son majestuosas con fachadas a cada cual más sorprendente. Praga es la capital y la mayor ciudad de la República Checa, así como la capital de la región de Bohemia. Situada en las orillas del río Moldava, tiene aproximadamente 1,2 millones de habitantes, aunque el área metropolitana cuenta con una población de 1,4 millones de habitantes. Algunos apodos de Praga son “la ciudad de las cien cúpulas”, “la ciudad dorada”, “París de los años 20 en los años 90”, “la madre de todas las ciudades” y “el corazón de Europa”. Tuvo muchísimos años bajo el dominio comunista. Praga está entretejida de callejuelas llenas de torres y cúpulas de iglesias Praga es una encantadora ciudad de puentes, iglesias, torres y cúpulas de las iglesias doradas, cuyo centro histórico llama la atención de sus visitantes por una extraordinaria simbiosis de estilos arquitectónicos. Se trata de una moderna metrópoli europea que desde hace más de diez siglos mira su cara en el espejo de su símbolo más antiguo: el río Moldava. Recorriendo esta animada ciudad se percibe la grata presencia de las rotondas románticas, pasando por las torres góticas, casas de los burgueses y palacios renacentistas, sinagogas judías hasta las iglesias y monasterios barrocos. La ciudad está entretejida de callejuelas, llenas de torres doradas y cúpulas de las iglesias. Praga es también la ciudad de los espacios verdes. Como un buen ejemplo se puede mencionar el esfuerzo de los arquitectos barrocos en dotar los palacios de sus correspondientes jardines llenos de pabellones, glorietas y quioscos, como se puede ver hasta hoy en la ladera debajo del Castillo de Praga. Aparte de ellas, la capital está llena de parques y jardines: en el centro mismo de Praga está la huerta de “Petrcaron ínské sady” entre la Ciudad Pequeña y Strahov; el jardín de Frantiökánská zahrada cerca de la iglesia de la María de las Nieves o el parque de Havlíčkovy sady en el barrio de Vinohrady. El antiguo coto, hoy parque de Stromovka o la zona de recreo en Divoká äárka ofrecen la posibilidad de estar en la naturaleza. Un decisivo elemento en la imagen de Praga son los quince grandes puentes, catorce de ellos sobre el río Moldava y uno sobre el barrio y valle de Nusle. El más antiguo y valioso fue construido en el año 1357, lleva el nombre de su fundador Carlos IV. Es imposible evitar pasar por él si se camina por una ruta obligada, la Calle Real, la más conocida ruta turística que lleva desde el centro de la ciudad al Castillo de Praga. Una de las mejores vistas al Castillo de Praga las ofrece precisamente el comienzo del Puente de Carlos. El efecto de la panorámica del castillo se debe en parte al hecho que se pueden apreciar en él casi todos los estilos artísticos. En la metrópoli checa hay una extraordinaria cantidad de teatros, salas de concierto, espacios de exposiciones, museos y galerías. No en vano se dice que Praga es tan variada como uno podría desear. A los visitantes escubre una de sus múltiples y mágicas caras. Es una ciudad bonita, ideal para perderse callejeando porque casi todos los edificios que tiene son dignos de ver. PLAZA VIEJA La Plaza Vieja es el recinto más destacado del casco histórico de Praga. La plaza fue fundada en el siglo XII y en la misma han tenido lugar numerosos acontecimientos históricos. El Ayuntamiento de la Plaza Vieja y el templo de la Madre de Dios de T?n son las edificaciones dominantes de la plaza; en este recinto, además, se puede visitar la iglesia de San Nicolás, de estilo barroco, el palacio de la familia Kinsk?, de estilo rococó, y la Casa de la Campana de Piedra, palacio municipal de estilo gótico construido en el siglo XIV donde se encuentran hoy día las salas de concierto y de exhibiciones de la Galería de Praga. En la plaza pueden ver el monumento al reformador religioso checo, Juan Hus, del escultor Ladislav Saloun. En el pavimento está marcado el lugar donde fueron ejecutados los 27 caballeros checos (el 21 de junio de 1621) y el meridiano que pasa por Praga. El Ayuntamiento de Praga con el Reloj Astronómico El Ayuntamiento fue fundado en 1338 como sede de la Administración Autónoma de la Ciudad Vieja. La parte más antigua del edificio, de estilo gótico, con una torre y una capilla de mirador adornada con abundantes ornamentos, data de la segunda mitad del siglo XIV. Doce apóstoles comparecen en el Reloj Astronómico (construido a principios del siglo XV) cada hora desde las 9:00 hasta las 21:00 horas. En la parte inferior del edificio está colocado un calendario con zodíaco del autor Josef Mánes . El ala oriental del Ayuntamiento, de estilo neogótico, fue destruida el 8 de mayo de 1945, en las postrimerías de la Segunda Guerra Mundial, y hasta hoy en día no ha sido renovada. Puente de Carlos Es el más antiguo puente de Praga y se encuentra en el lugar donde se hallaba antes el Puente de Judit, destruido en 1342 por las inundaciones. Originalmente, los ciudadanos lo llamaban “Puente de Piedra” o “Puente de Praga”. EL CASTILLO DE PRAGA El castillo de Praga, monumento inscrito en la lista del Patrimonio Cultural Checo, se convirtió en un símbolo de la evolución de más de 1000 años del Estado Checo. Desde que fue iniciada su construcción, aproximadamente en la última cuarta parte del siglo IX, el Castillo de Praga ha seguido desarrollándose durante unos 1100 años. Se trata de un complejo monumental de palacios, así como de edificios religiosos, de oficina, de fortificación y de vivienda de todos los estilos arquitectónicos. El castillo se extiende alrededor de tres patios en una superficie de 45 hectáreas. Originalmente, príncipes y reyes residieron en ese lugar. Desde el año 1918 el castillo es la sede presidencial. Las catedrales de San Vito, San Venceslao y San Adalberto La catedral de estilo gótico, un símbolo religioso del Estado Checo, fue fundada por Juan de Luxemburgo y sus hijos Carlos y Juan Enrique en 1344 en el lugar donde se hallaba originalmente una rotunda de estilo romano. El edificio fue construido según los planos del arquitecto Matías de Arras , y posteriormente por Petr Parlé. Hasta que se llevara a cabo la construcción definitiva en 1929, transcurrieron casi 600 años. La capilla de San Venceslao, la tumba de los reyes checos en el subterráneo, así como las joyas de la Corona, se encuentran en la catedral, que se caracteriza por sus singulares adornos artísticos.